La Casa de Góngora en Córdoba es podría ser una vivienda más de tantas hermosas que pueblan las calles de capital califal, pero este caserón del siglo XVII alberga en sus 1085 metros cuadrados una casa museo en honor al poeta barroco cordobés, Luis de Góngora, un Centro de Estudios Gongorinos y una sala de Exposiciones.
Se trataba de una antigua ambición del concejal de Cultura, Luis Miguel Moreno Calderón, y ahora empieza a cobrar forma. Al menos once colectivos cordobeses han planteado ya actividades concretas para utilizar la Casa Góngora como centro literario, que comenzarán el próximo miércoles, día 19, con la presentación del libro «Una fuga diferente. Parvulario», del poeta cordobés Antonio García Siles, y que tendrá como maestro de ceremonias al delegado en la provincia de la Unión Nacional de Escritores de España, Miguel Ángel Matamala.
Se trata, en palabras del edil, de hacer de la Casa Góngora la «Casa de las Letras» en Córdoba, y si en octubre de 2013, cuando esta iniciativa cobraba forma, sólo pudo reunirse con cuatro o cinco colectivos literarios interesados en que esa sede «tenga una actividad regular», hoy son ya más de diez con planteamientos para que cada miércoles se celebre algún tipo de actividad. Es más, «se podría ampliar a otros días de la semana, dependiendo del número de actividades que se planteen, incluso para particulares que, por ejemplo, quieran presentar su propio libro», ha comentado el responsable municipal.
Así, por ejemplo, el próximo 26, se dará a conocer el poemario «La Mente del Mono», de Antonio José Rayuela, al tiempo que el próximo 5 de marzo, la Asociación Nueva Poesía de Córdoba presentará el número cinco del cuaderno «Nueva Poesía».
Tal y como ha explicado esta mañana el propio Moreno Calderón, la Casa Góngora estaba siendo «infrautilizada», únicamente como centro expositivo en la planta alta, mientras se ponía en marcha el ambicioso proyecto de crear allí el Centro de Estudios Gongorinos, que por diversos motivos continúa paralizado. «Teníamos dos opciones», ha explicado, «o quedarnos sin hacer nada hasta que tuviéramos posibilidades de ponerlo en marcha o dar algún paso adelante en esa dirección». Y así ha sido.
Por lo pronto, ha adelantado que la Cátedra Luis de Góngora está a punto de ponerse en marcha, «no más allá de dos meses», ya que los organismos que intervienen en ella, la Universidad de Córdoba, la Diputación y el Ayuntamiento, tienen previsto darle luz verde en sus próximos y respectivos consejos de gobierno. La idea, según el concejal, es que tenga «no tanto un contenido científico como de divulgación orientativa dirigido al gran público, quizá con seminarios concretos en los que participen expertos en la materia». Para su funcionamiento las instituciones local y provincial pondrán sobre la mesa 20.000 euros cada una y la UCO, otros 10.000; en total, 50.000 euros.
En cuanto al Centro de Estudios Gongorinos, Moreno Calderón consideró que se trata de un proyecto «irrenunciable», pero que a día de hoy no es posible su puesta en marcha, tal y como establecen sus estatutos aprobados en 2008. Entyre otras cuestiones, porque la normativa impide a las administraciones locales la contratación de personal al margen de una serie de servicios concretos, y este Centro requiere de una plantilla específica para su funcionamiento.